martes, 28 de abril de 2015

Aporte de MICLA al XXV Capítulo General


 
MISIONEROS CLARETIANOS DE AMÉRICA (MICLA)

-Aporte al XXV Capítulo General-

Desde la II Asamblea Ordinaria de MICLA en Ballenita, Ecuador, celebrada del 14 al 17 de abril de 2015, hacemos llegar este aporte y sentir de cara al próximo Capítulo General de la Congregación.
 

1.      Cada Organismo ha podido hacer llegar ya su aporte correspondiente al Capítulo según la dinámica que se nos pedía de las cuatro preguntas. Vemos necesario tener en cuenta todo el trabajado realizado estos años en la Iglesia y en la Congregación: Sínodos, Evangelii Gaudium, Cartas Circulares, Taller en Colmenar Viejo de Teología  para nuestra misión, Encuentros continentales promovidos por el Prefecto general de apostolado, etc.

2.      El Capítulo General debe centrarse en nuestra misión como claretianos, en actualizar la MCH. Necesitamos acordar el modo de entender la misión, enfocarla adecuadamente, fieles a nuestro origen carismático: misión compartida, servicio misionero de la Palabra, “missio intergentes”, misión profética. Y este modo de entender la misión debe ser principio de encuentro y comunión, debe marcar nuestra espiritualidad y modo de leer la Palabra, determinar nuestro estilo comunitario de vida, orientar los procesos formativos y la reorganización de los organismos y de la economía. Este modo de entender la misión nos hace mirar otros escenarios: la política, la economía, la ecología, las culturas, la defensa de la vida. El servicio misionero de la Palabra, por ejemplo, se ha enriquecido con las distintas hermenéuticas.

3.      Nos insertamos con frecuencia en la vida del mundo y de la Iglesia de manera vaga y ambigua, sin tener en cuenta el modo de ser y actuar propio. Necesitamos dar con un esquema de comprensión de nuestra misión y expresarlo en una especie de proyecto congregacional. Proyecto que nos ayude a ir saliendo de la dispersión y de la ambigüedad, defina los rasgos mayores de nuestro estilo de vida misionero y nos concentre en pocas prioridades en las que especializarnos: la animación bíblica y la solidaridad profética, por ejemplo. Proyecto que, con todo esto, haga más significativa nuestra presencia en el mundo y en la Iglesia. Tal vez tenemos que equilibrar nuestra manera de vivir la misión, y pasar de un estar en muchos lugares y abarcar geográficamente a un resaltar más nuestras prioridades y aportes específicos desde donde estemos. Apoyamos que estas prioridades se impulsen desde Secretarías generales, no necesariamente con sede en Roma, como la Secretaría bíblica, para impulsar el trabajo en equipo de toda la Congregación en estas áreas.

4.      El rasgo más significativo de nuestra vida misionera tiene que ser siempre el estilo comunitario. Va pasando el tiempo en que la misión nos exigía estar solos para estar más cerca de la gente y abarcar más geográficamente. Hoy caminamos hacia comunidades más numerosas, pero que saben trabajar en equipo, con sus miembros más especializados en las prioridades congregacionales. Comunidades cuyos miembros son más itinerantes, fruto de su dedicación a una prioridad que lo va especializando. Nuestra misión claretiana exige vivir la comunidad, estando abiertos a la corresponsabilidad para el cumplimiento de la misión, viviendo la amistad y la caridad desinteresada entre personas de distinta edad, condición, raza o economía. Nos exige tener criterios más claros, por ejemplo, para los destinos intercontinentales. Queremos convertir nuestras comunidades en escuelas de misión, comunión y formación.              

      
5.      El enfoque adecuado de nuestra misión y la vida comunitaria, el proyecto congregacional del que hablamos, deben orientar nuestra espiritualidad y nuestros procesos formativos, tanto iniciales como continuos; deben ser principio de discernimiento, de animación pedagógica y núcleo que renueve nuestra vocación y promueva nuevas. Nuestra misión claretiana exige vivir como consagrados, centrados en nuestra vocación. Debemos seguir impulsando la pastoral vocacional y preocuparnos por acertar con el proceso formativo de los misioneros: que sea integral, que ayude a la madurez, en comunidad, desde experiencias concretas, que enseñe a trabajar en equipo. Proponemos mayor atención y motivación a la espiritualidad y formación permanente: desde nuestras prioridades, por franjas de edades.


6.      La reorganización de los organismos de la Congregación, los destinos a la misión universal y la economía deben responder a ese proyecto congregacional y potenciarse desde ese modo adecuado de entender la misión: más itinerante según las prioridades, no tan atado a lo territorial, en comunicación de personas y de bienes. Debemos trabajar desde un proyecto misionero congregacional con un horizonte claro para que todo proceso de reorganización tenga sentido. Debemos poner todos los recursos al servicio de la evangelización y dar testimonio personal y comunitario de pobreza. Necesitamos ser más creativos para hacer viable el trabajo en nuevos equipos itinerantes desde nuestras prioridades; hacer transferencia de patrimonios a lugares de misión más necesitados.

P. Mario Gutiérrez Medina, cmf              P. Rosendo Urrabazo, cmf
            Presidente  de MICLA                               Vicepresidente
     
      P. Ismael Montero, cmf                            P. José Vidal Pérez, cmf
           Vocal                                                           Secretario Ejecutivo

 

 

 

Carta del Padre General a la II Asamblea Ordinaria de MICLA


CONGREGATIO MISSIONARIORUM FILIORUM
IMMACULATI CORDIS B. MARIAE VIRGINIS
(Clarettiani)
SUPERIOR GENERALIS

 

Roma, 1 de febrero, 2015

 

            P. Mario Gutiérrez, cmf.

            Presidente de MICLA

 

            Estimado P. Mario y participantes en la Asamblea de MICLA:


            Ya que no puedo acompañaros personalmente en esta Asamblea, quiero hacerme presente a través de estas líneas compartiendo con vosotros algunos sentimientos y pensamientos que me suscita este momento congregacional que estamos viviendo y, más concretamente, el momento congregacional de América.


            Siento que debo comenzar expresando una profunda gratitud por el testimonio de vida misionera de la Congregación en América. El anuncio del Evangelio sigue siendo la brújula que orienta la vida de la Congregación en este continente, presente en la vida de nuestro Instituto desde los inicios de nuestra existencia, tanto a través del ministerio del P. Fundador en Cuba como de otros muchos misioneros a partir de la primera fundación en Chile. Y a vosotros, los Superiores Mayores de América, os quiero agradecer tanto vuestro servicio a los hermanos, sosteniendo su compromiso misionero, como a la Congregación universal, manteniendo una comunión que nos abre a una solidaridad más allá de los propios horizontes.

 
            Estamos viviendo un momento eclesial esperanzador. Lo comentaba en la carta circular con la que anunciaba la celebración de nuestro XXV Capítulo General. La experiencia eclesial latinoamericana se ha hecho sentir en la Iglesia universal a través del Papa Francisco. Se nos está pidiendo mayor fidelidad al Evangelio y esto supone una adhesión incondicional -la palabra “incondicional” es muy exigente- a Jesús y una gran generosidad para salir hacia donde nuestra presencia sea más necesaria, “las periferias” de nuestro mundo de las que habla tan repetidamente el Papa Francisco o las “fronteras” de la evangelización que nos señalaba a los religiosos el Sínodo sobre la Nueva Evangelización.


            Hemos querido recoger esta llamada en el tema Capitular -“Llamados a evangelizar: testigos y mensajeros de la alegría del Evangelio”- y en el proceso que vamos a seguir en la preparación y realización del Capítulo. Os lo comentaba también en la circular de anuncio. Nos hemos querido centrar en la misión, que es más que el apostolado, porque marca y orienta todas las dimensiones de nuestra vida: espiritualidad, comunidad, formación, apostolado, economía y organización. Cuáles deben ser las características de esta misión y cómo deben encarnarse en las diversas dimensiones de nuestra vida es el tema fundamental propuesto para el discernimiento capitular. No nos perdamos en otras consideraciones que nos pueden distraer de este punto central.

            Necesitamos la aportación de América a este discernimiento. Os comparto algunos puntos que considero  importantes en este sentido.
 

1.      Tanto CICLA como NACLA ofrecieron en su momento estímulos importantes al camino congregacional de reflexión sobre el carisma y sobre la definición de las opciones misioneras de la Congregación. La aportación de MICLA sigue siendo necesaria. Por ello, creo que debéis cuidar más los procesos de reflexión y compartir vuestra aportación para enriquecer con ella a toda la Congregación. Observo un cierto estancamiento en este sentido. Nos hemos vuelto muy inmediatistas y, a veces, incluso parece que nos paraliza la preocupación por obras e instituciones. Os recuerdo lo que el Papa Francisco nos decía  a los Superiores Generales: “el carisma permanece, las obras pasan y cambian”. No dejéis de dedicar tiempo y recursos a profundizar la reflexión sobre nuestro patrimonio carismático y sobre cómo hacerlo hoy alimento de nuestra espiritualidad y estímulo para los proyectos misioneros. Nuestros Centros de estudios teológicos tienen una especial responsabilidad para acompañar estos procesos. Tenéis que seguir preparando personas que puedan ayudar en este sentido.


2.      Me preocupa el estado de salud de nuestra espiritualidad misionera. Observo reticencias en asumir compromisos misioneros en las “periferias”. Nos cuesta incluso mantener presencias en aquellos lugares difíciles que la Iglesia nos encargó confiando en nuestro espíritu misionero y en los que la misión que nos fue encomendada no ha sido todavía completada. No debemos renunciar a mantener allí nuestra presencia y a buscar nuevas formas de expresarla. No cabe duda de que algunas posiciones deberán pasar al cuidado de las iglesias particulares que hemos ayudado a crecer en estos años, pero no podemos renunciar a seguir acompañándolas cuando se trata de lugares donde la pobreza y la marginación siguen marcando la vida de tantas personas que han encontrado en la presencia y la dedicación generosa de nuestros misioneros la motivación para mantener viva su esperanza y la lucha por la dignidad de sus pueblos. Agradezco profundamente el testimonio de tantos misioneros y espero que encuentre continuidad en las nuevas generaciones.


3.      La Congregación se ha abierto a nuevas iniciativas apostólicas en el campo de la educación y de los medios de comunicación social, sobre todo a través de las nuevas tecnologías. Son dos ámbitos que hay que afianzar y que deben expresar siempre las opciones congregacionales de misión. Será importante revisarlos después del Capítulo General a partir de la orientaciones que éste nos ofrezca. Hay que preparar personal para estos ministerios, pero quiero subrayar que esta preparación requiere, además de los necesarios estudios de especialización, una experiencia misionera que conecte profundamente a quienes se van a dedicar a estos ministerios con la vida de quienes sufren las consecuencias de una sociedad centrada en el provecho y en una eficiencia que se mide casi siempre por resultados económicos. El Papa nos esta indicando continuamente desde dónde y hacia dónde tenemos que mirar y a quiénes tenemos que llevar siempre en nuestro corazón y situar al centro de nuestras obras y actividades.
 

4.      Me alegra ver cómo se ha crecido en el ámbito de la pastoral bíblica desarrollando diversas claves hermenéuticas que hacen sentir al pueblo la Palabra de Dios cercana a sus preocupaciones y le ayudan a descubrir su mensaje de vida y esperanza. Seguid trabajando en esta línea. Sería bueno que vuestro trabajo y los encuentros bíblicos ayudaran también el caminar de otras partes de la Congregación con menos experiencia en este campo apostólico.


5.      Veo con gozo el crecimiento en el ámbito de la misión compartida. Compartir la vida y la misión con otros enriquece nuestra experiencia y dinamiza el trabajo misionero.


6.      Durante estos últimos años hemos dado algunos pasos importantes en la reorganización congregacional. Lo hemos hecho respondiendo a las decisiones de los últimos Capítulos Generales. Se trata de una experiencia vivida por la mayoría de las Órdenes y Congregaciones religiosas que tiene la potencialidad de generar dinamismo misionero. Todo depende de la actitud que tengamos ante los nuevos desafíos que la reorganización nos plantea y la disponibilidad ante los nuevos horizontes que nos abre. Veo que en algunos lugares está costando crear un verdadero sentido de pertenencia a la nueva Provincia y abrirse a la comunión con los hermanos y a los nuevos horizontes misioneros que se ofrecen. Hay que consolidar la “cultura claretiana” que es donde nos sentimos todos hermanos, miembros de aquella comunidad iniciada por Claret y unos sacerdotes “a quienes Dios había dado el mismo espíritu” (cf. Aut 489). Si este espíritu está presente, siempre son superables las dificultades que surgen de las distintas tradiciones culturales y aquellas que hunden sus raíces en los miedos que nos asaltan ante los cambios que conlleva la nueva organización congregacional.

 
7.      La Congregación en América se ha visto enriquecida con la presencia de claretianos de otros contextos geográficos y culturales. Esta experiencia de diálogo intercultural exige a quienes llegan apertura y humildad para aprender y un corazón grande para amar a las personas a quienes han sido enviados. Pero pide también a quienes reciben a estos hermanos abrirse a la aportación que ellos pueden ofrecer a las comunidades y apostolados y que va a enriquecer la historia de las Provincias y Delegaciones de América. Por otra parte, pido una renovada apertura a la misión universal de la Congregación a los jóvenes claretianos de América.


8.      Sé que los equipos y encargados de la pastoral vocacional están trabajando con generosa dedicación. La pastoral vocacional es, sin embargo, responsabilidad de todos (cf. CC 58). Cada uno debe preguntarse concretamente: qué he hecho yo por la pastoral vocacional esta semana, este mes, este año. Crear la cultura vocacional es una tarea de todos y exige a cada uno una profunda conversión para que la vida de las personas y las comunidades exprese verdaderamente el carisma misionero que nos debe identificar en la Iglesia. Solamente si vivimos entusiasmados por nuestra vocación, podremos entusiasmar a otros. No olvidéis esta prioridad.


El Papa nos decía a los religiosos: “despertad al mundo”. No puede despertar a nadie quien está dormido. Que esta Asamblea de MICLA y el Capítulo General nos ayuden a vivir vigilantes para que la llamada del Señor nos encuentre dispuestos a ponernos en camino hacia las metas que el Espíritu nos señala hoy.


Gracias al P. Mario y a los otros miembros de la Junta Directiva que han animado la vida de la Congregación en América durante estos primeros tres años de MICLA.


Un abrazo fraterno,

 

Josep M. Abella, cmf.

Superior General

viernes, 24 de abril de 2015

Nuevo Coordinador de ReBiClar




 
En la recién Asamblea Ordinaria de MICLA celebrada en Ballenitas, Ecuador, se aprobó el nombramiento como nuevo coordinador de ReBiClar a Carlos Verga, CMF de la Provincia de San José de Sur. De  esta manera se potencia todo el trabajo que se ha venido realizando en el caminar bíblico de los Claretianos a nivel continental. Le deseamos junto a su equipo éxitos y pedimos al Dios de la Vida muchos frutos. 

martes, 21 de abril de 2015

Concluyó la II Asamblea, en Ballenita


Reelegida la Junta Directiva
para el trienio 2015-2018

Relevo en la Secretaría ejecutiva

De Izq. a Der.: José Vidal, Mario Gutiérrez, Ismael Montero, Rosendo Urrabazo

Con la toma de posesión de la Junta Directiva y la definición de prioridades y programación para el trienio, concluyó exitosamente el pasado viernes 17 de abril, la segunda Asamblea ordinaria de la Conferencia interprovincial de los Misioneros Claretianos de América, que se llevó a cabo en Ballenita, Ecuador, en la Casa claretiana de ejercicios espirituales de Colombia-Ecuador.

  La reelección del equipo líder de este colectivo claretiano continental es uno de los indicadores del buen comienzo de integración que se va logrando de lo que hasta 2012 fueran CICLA, la conferencia de Latinoamérica y NACLA, conformada por Estados Unidos, Canadá y Gran Bretaña.

  Les presentamos los integrantes de la Junta:
  • El Presidente es Mario Gutiérrez, chileno. Actualmente se desempeña como Superior de la Provincia de San José del Sur y tiene una buena trayectoria de compromiso especialmente en el trabajo con jóvenes y con comunidades.
  • El Vicepresidente es Rosendo Urrabazo, Provincial de Estados Unidos - Canadá. Nacido en USA, procede de familia mexicana. Fue miembro del Consejo general de la Congregación en el sexenio 2003-2009,
  • El Vocal es Ismael Montero, español con una trayectoria de 30 años de incansable labor misionera especialmente en Honduras, es el Provincial actual de Centroamérica.


Nuevo Secretario ejecutivo

  Para ese cargo fue elegido el José Vidal, nacido en El Salvador, actualmente Prefecto de Apostolado de Centroamérica y entusiasta líder del trabajo misionero bíblico con el equipo Rebiclar.
José remplaza a José Fernando Tobón, que pidió ser relevado del cargo, por sus compromisos con los Hogares Claret de Colombia.
  La Asamblea consideró además oportuno y menos difícil para las Provincias, que la Secretaría pueda ser llevada de manera rotativa, por alguien de un Organismo distinto en cada trienio.

Las prioridades del trienio

  La Asamblea determinó que, además de una presencia muy activa, personal y colegial de los capitulares de América en el próximo Capítulo general de la Congregación, a celebrarse en Roma en los meses de agosto y septiembre próximos, dos prioridades estén muy presentes en la programación y dinámicas de MICLA en los tres años siguientes:

La animación bíblica
El proyecto «Solidaridad y Misión»


  En cuanto a la Palabra, se trata de seguir cualificando cada vez más la edición del Diario Bíblico anual y su difusión, y la programación presencial y virtual del equipo ReBiClar (Red Bíblica Claretiana).
  En cuanto a Solidaridad y Misión queremos estar muy en la articulación que pretende la Congregación de todo lo referente a JPIC, las PROCLADES u ONGs provinciales de acción social, el Voluntariado y nuestra presencia en la ONU.

En torno a dichas prioridades se ha empezado a confeccionar, ya en la Asamblea, un cronograma que prevé, los encuentros de Formación y las experiencias conjuntas de las etapas formativas, la atención a la pastoral educativa, una comunicación más impactante que consolide la conferencia y nos permita dar y recibir todo lo que pueda enriquecer la misión claretiana y la presencia profética de la Palabra y la Iglesia a lo largo y ancho del continente americano.

miércoles, 15 de abril de 2015

Desde Ballenita, Ecuador, martes 14 de abril


“Te damos gracias Señor porque nos has llamado a evangelizar como a nuestro fundador San Antonio María Claret…” Con esta oración congregacional, que desde ahora aviva nuestra brasa misionera, cuando caminamos hacia el XXV Capítulo General, abrimos la II Asamblea Ordinaria de la Conferencia Interprovincial de Claretianos de América (MICLA). Nuestra Asamblea está programada del 14 al 17 de Abril, en nuestra casa de “Ballenita”, Ecuador.
El resumen del primer día de trabajo nos permite destacar algunas luces importantes recibidas.
El Dr. Enrique Galarza, después de exponer la situación geográfica, social, eclesial y claretiana del Ecuador, nos insistió en el reto de la Iglesia, y de los claretianos en particular, de formar y promover la participación misionera del laicado, con el fin de superar el clericalismo. Luego, ante la constatación de un clero poco preparado y acomodado en esta Iglesia local, nos invitó a revisar la calidad con que realizamos la misión claretiana en este continente. También, ante el escaso número de vocaciones, preguntó sobre nuestra participación creativa y responsable de esta urgencia eclesial.
El mensaje recibido del P. General, Josep M. Abella, representó otra luz significativa en nuestra primera jornada. En las primeras líneas del mensaje nos recordó el momento eclesial esperanzador que estamos viviendo. Los Misioneros Claretianos, en particular los de América, debemos integrarnos en este momento desde la reflexión y desde la disponibilidad misionera. Para ello, deberemos superar el estancamiento, la superficialidad, el inmediatismo y toda actitud que aniquila o empobrece nuestra riqueza carismática.

Los 21 participantes en la Asamblea son los Superiores Mayores y los Delegados de los 9 Organismos que forman la Conferencia interprovincial de los Claretianos de América, más el Secretario ejecutivo y algunos invitados que lideran los proyectos de Biblia y JPIC 

Ya por la tarde, el P. José Fernando Tobón, secretario ejecutivo de la Junta Directiva de MICLA, presentó el informe del trabajo realizado  en el presente trienio. El diálogo constante entre organismos, a través de las reuniones o en conferencias virtuales, nos ha permitido intercambiar y apoyar algunos proyectos misioneros. También nos ha ayudado a definir y sintonizar con los criterios pastorales en este continente.
Finalizamos la jornada con la celebración de la Eucaristía, presidida por la directiva saliente de MICLA.

Equipo de Comunicaciones

lunes, 6 de abril de 2015

Comunicación oficial


II Asamblea Ordinaria
Ballenita (Ecuador), 13 a 18 de abril de 2015
Circular 3

Hermanos Claretianos de América:

   A una semana de nuestro encuentro en Ecuador, reciban nuestro saludo de Pascua, en el esplendor y el compromiso de la resurrección de Jesús!

   Les hacemos llegar con esta circular, el borrador del Cronograma de la Asamblea, para que se apropien de esa gran oportunidad de comunión y proyección de la misión claretiana en el continente americano.

  Al enviárselo ahora, los invitamos a
  • hacernos llegar sus indicaciones y sugerencias, para un mejor logro de nuestro objetivo al reunirnos y agilizar el procedimiento de aprobación en la sesión inicial;
  • prepararnos anímicamente para ser activos participantes y voceros significativos de quienes nos han elegido;
  • acabar de explorar el sentir y las propuestas que en su entorno se tienen con respecto a este espacio de colegialidad que la Congregación tiene;
  • pensar con creatividad, ilusión y realismo en las líneas de acción y liderazgos que hay que definir para que MICLA sea cada vez más lo que los Estatutos proponen y las comunidades esperan y anhelan;
  • tomar nota del día que corresponde la Eucaristía o la Oración a sus organismos para prepararla, en cuanto a contenidos, cantos y ambientación, de manera creativa e impactante;
  • seleccionar y llevar material multimedial sobre la realidad social y misionera y las experiencias valiosas de sus Organismos, para presentarlas en las sesiones de la noche, acompañado de la degustación de productos típicos de sus países y el intercambio de souvenires. Avisarnos oportunamente si tienen algún requerimiento tecnológico.

Indicaciones prácticas

-  Recordemos que nuestros anfitriones esta vez serán los hermanos de Colombia Ecuador en su Casa de Retiros San Fernando, ubicada en Ballenita, Ecuador, una pequeña ciudad a 130 kms de Guayaquil. Ver ubicación e instalaciones en http://www.casaballenita.ec/
-  El clima en el lugar es caliente, de costa ecuatorial. Pueden seguir la previsión meteorológica de las próximas dos semanas en el municipio de Santa Elena, donde está ubicada Ballenita en http://www.tutiempo.net/ecuador/santa-elena.html.
-  Tenemos ya casi todos los datos de llegada al aeropuerto de Guayaquil,  para organizar la recepción y transporte a la casa de encuentros, sobre lo cual les estaremos informando en estos días, apenas recibamos la información de los que aún no se han manifestado.
-  La cuota de US$ 250 por persona, que cubre estadía y transportes de llegada, salida y el tour, puede pagarse en efectivo durante la Asamblea o por transferencia a la cuenta de MICLA en el Fundus, que debe ser autorizada expresamente por el Ecónomo provincial al H. Evencio Cuñado.
Fraternalmente,
             Mario Gutiérrez, CMF                            José Fernando Tobón, CMF
               Presidente de MICLA                                     Secretario Ejecutivo
                                                                                Email: miclasej@gmail.com

                                                                                          Whatsapp: +573128331797